Un corte, un grano que explota o un período menstrual en mitad de la noche pueden provocar manchas de sangre en nuestra ropa o en la cama.

Manchas de sangre seca

Afortunadamente, hoy en día es mucho más fácil que en el pasado eliminar estos residuos orgánicos de la ropa y los tejidos. ¿Pero cómo? Muy fácil. Sólo necesitas conocer algunos trucos y compararlos por su gran efectividad.

Cómo quitar las manchas de sangre seca

Las manchas de sangre tienen fama de ser muy difíciles de quitar , pero si son manchas de sangre seca el problema es mayor. Intentamos disipar este mito explicándote cuáles son los mejores productos para limpiar manchas de sangre seca y fresca.

En el caso de las manchas de sangre, mucho depende del material sobre el que cayó la gota. Ahora bien, si queremos resaltar un falso mito que hará prácticamente imposible quitar la mancha: utiliza agua caliente.

Limpiar las manchas de sangre seca.

El agua caliente actúa como coagulante, lo que hace que se concentre y se adhiera más a la superficie y dificulte la limpieza. Asimismo, la sangre seca, aunque parezca más fácil de limpiar, no lo es. Con sangre, cuanto antes actuemos, mayores serán las posibilidades de éxito.

En cualquier tejido, la velocidad es la clave de la eficacia de cualquier método para limpiar la sangre. Y es importante tratar la prenda antes de limpiarla porque puede quedarse pegada a la ropa.

En la ropa habitual, que no es delicada, lo más eficaz es mojarla en agua fría y enjabonarla, frotando bien la zona para que no quede enrollada.

Pasta dental

Si se trata de una pieza de tela delicada (como una blusa o un vestido de seda), lo mejor es olvidarse del agua oxigenada. Podríamos correr el riesgo de quemarnos la cabeza . Para este tipo de tejidos lo más recomendado es la pasta de dientes clásica, sin aditivos ni colorantes.

Por ello, se aplica directamente sobre la zona afectada y bordes, dejando secar y luego enjuagando bien con agua fría. Sólo se debe frotar cuando la prenda finalmente haya sido lavada.

Si no estás en casa, prueba a mojar la mancha con agua con gas muy fría, solucionaremos el problema antes de llegar a casa.

Sal gruesa

La sal gruesa para quitar las manchas de sangre también se puede utilizar en prendas oscuras como los jeans. Si la mancha es reciente un buen truco es lavarla con agua y sal poniendo la prenda en remojo en agua fría a la que le añadimos un poco de sal gorda.

Sal gruesa

Una vez finalizado el remojo podemos proceder frotando delicadamente la mancha entre nuestras manos . La sal ayudará a eliminar la sangre que sea más adherente y no penetre demasiado en los tejidos.

Luego podemos realizar el lavado normal, de esta forma no correremos el riesgo de que los colores se desvanezcan.

Sal y agua oxigenada para ropa blanca.

En caso de que la ropa manchada de sangre sea blanca, se debe tener más cuidado al limpiar para que la mancha no se desvanezca sino que sea permanente.

En primer lugar tendrás que lavarlo lo antes posible para que los pigmentos de la sangre no penetren demasiado. Cuando la sangre aún está fresca es mucho más fácil extraerla de los tejidos, así que actúa inmediatamente para evitar que la prenda se deteriore.

En este caso, si tenemos acceso a agua oxigenada podríamos pulverizar un poco directamente sobre la mancha, y luego lavarla como es habitual en agua fría.

Bicarbonato

¡Es un producto con mil aplicaciones! Lo utilizamos en la cocina y el baño, para limpiar suelos o para eliminar moho. También en este caso las propiedades del bicarbonato ayudan a quienes tienen que lidiar con una mancha de sangre, por ejemplo en el colchón.

Bicarbonato y cepillos de dientes

Tendrás que crear una especie de crema con agua y bicarbonato con la que frotar la mancha. Una vez que la pieza se haya secado, cepilla la mancha o cualquier mancha.