Un truco que no todo el mundo conoce pero que resulta muy útil en la cocina: por qué hay que poner sal al bizcocho de vajilla.

Esponjas para lavar platos

Para muchos puede parecer uno de los objetos más limpios que tenemos en casa, ya que entra en contacto con el agua y el jabón a diario. Sin embargo, la esponja para platos puede convertirse en un excelente refugio para gérmenes y bacterias . Así que veamos cómo mantenerlo limpio simplemente usando sal fina.

Las propiedades de la sal, muy útiles en casa.

La sal nunca falta en la cocina y puede ser una ayuda válida no sólo a nivel alimentario, sino también para mantener la higiene de la ropa, los alimentos, los objetos y las superficies.
Muy útil para lavar frutas y verduras , ayudará a eliminar todas las bacterias presentes en los alimentos gracias a sus conocidas propiedades antisépticas. Simplemente pon frutas y verduras en un bol con agua y sal y déjalo todo en remojo durante unos 15 minutos. No te preocupes por acabar con fruta salada, un buen enjuague y la sal desaparecerá por completo.

Otro uso poco conocido de la sal tiene que ver con la ropa descolorida . Remoja durante una hora en agua fría, sal y vinagre y tu ropa descolorida recuperará el color.

Adecuado no sólo para desinfectar sino también para eliminar malos olores. La sal se utiliza a menudo en combinación con bicarbonato de sodio en el interior de los zapatos para frenar los malos olores.

El bizcocho para platos, cómo mantenerlo limpio con sal

¿Sabías que miles de gérmenes y bacterias tardan menos de 15 días en anidar en la esponja para lavar platos? Por este motivo es recomendable cambiar la esponja con frecuencia , precisamente para evitar que hongos y bacterias tengan la oportunidad de instalarse en lo que creemos que es un instrumento muy limpio. Pero no está tan limpio. A menudo el estancamiento de agua y jabón y la humedad pueden hacer que la clásica esponja lavavajillas sea una de las herramientas menos higiénicas que tenemos en casa. Pero existe una manera de evitar tener que tirar una esponja que aún está en buen estado después de tan solo 15 días y desinfectarla de la mejor manera posible.

En primer lugar, es una buena costumbre limpiar siempre la esponja una vez hayas terminado de lavar los platos . El procedimiento a realizar es muy sencillo, pues basta con enjuagar la esponja con agua corriente y retirar el exceso de jabón. Luego pon un poco de jabón para platos y vinagre blanco en el lado áspero del sebo y mezcla bien los dos ingredientes, haciendo que formen buena espuma por toda la esponja. Luego enjuaga bien la esponja, escúrrela y prepara tu lavabo para lo que es una verdadera rutina que debes repetir con frecuencia.

Usa sal para desinfectar

Coloca el bizcocho aún húmedo en el recipiente elegido y cúbrelo con sal fina. Luego agrega un poco de agua previamente hervida hasta cubrir completamente la superficie y déjala en remojo durante al menos 15 minutos. Pasado este tiempo, retira la esponja del lavabo y déjala secar al sol. Al hacer esto tu esponja quedará completamente desinfectada y libre de bacterias , gérmenes u hongos.

Para mantener una buena higiene, según su uso, sería útil repetir este procedimiento cada 15-20 días , para mantener siempre la esponja lavavajillas adecuadamente limpia y desinfectada.