Si hay una tarea del hogar especialmente difícil y pesada de llevar a cabo, es la limpieza de la vitrocerámica . No solo es propensa a la acumulación de todo tipo de alimentos y grasas, sino que además se les añade calor que las endurece y las hace muy difíciles de eliminar.

Afortunadamente existen trucos que pueden simplificar el trabajo y hacerlo mucho menos difícil, sin tener que recurrir a productos agresivos como la lejía, o herramientas como la esponja metálica que pueden rayar las superficies.

Si quieres mantener la placa impecable y libre de restos de comida y grasa, aplica alguno de los siguientes métodos y sorpréndete con los resultados.

primer método

Mezcla 120ml de vinagre blanco con 120ml de jabón líquido y 250ml de agua. Verter sobre la vitrocerámica y dejar actuar unos minutos, luego frotar con una esponja y finalmente secar con un paño limpio.

El jabón líquido disuelve la grasa, mientras que el vinagre disuelve la suciedad persistente y desinfecta a fondo.

Segundo método

El limón es un desengrasante natural y se puede utilizar para limpiar ollas, cubiertos e incluso la vitrocerámica. Particularmente útil contra la grasa incrustada, debe mezclarse con otros ingredientes para ser aún más eficaz.

Mezclar el zumo de 4 limones con un poco de agua, añadir 4 cucharadas de sal gorda, una de bicarbonato de sodio y verter sobre la vitrocerámica.

Dejar durante 5 minutos, luego usar una esponja para frotar bien. Finalmente, limpie con un paño húmedo.

Tercer método

Muy utilizada en la limpieza del hogar, la combinación de vinagre y bicarbonato de sodio es muy eficaz contra la grasa incrustada y otro tipo de suciedad.

Mezcle 100 ml de vinagre blanco con 3 cucharadas de bicarbonato de sodio, espere a que termine la reacción efervescente y luego use la solución para limpiar toda la placa.

Si es necesario, déjelo reposar de 2 a 3 minutos antes de frotar bien. Finalmente, limpie con un paño limpio.