¿Sabías que cuando pones una ramita de laurel en la ducha sucede algo que te deja sin palabras? ¡Veamos qué sucede y por qué deberías poner la hoja de laurel en la ducha!

¿Te gustaría darte una ducha aún más relajante y regeneradora? Embellecer aún más este momento es sencillo, gracias a la ramita de laurel, que te asegura efectos inimaginables. Realmente lo es, el laurel es un aliado precioso y un ingrediente natural que aporta aún más relajación en la ducha, frescor y fragancia.

El nivel de bienestar que puedes obtener gracias a esta planta es asombroso y debes conocer a fondo todas sus propiedades para entender a fondo qué beneficios aporta. ¡Así que descubramos todo lo que hay que saber sobre el laurel y los efectos que produce al poner una ramita en la ducha!

Todas las propiedades del laurel

Planta versátil y utilizada desde la antigüedad por sus propiedades digestivas, el laurel es muy común en las regiones que bordean el mar Mediterráneo. Además de ser utilizada en la cocina, esta planta tiene propiedades muy apreciadas en el campo fitoterapéutico.

 

Además de ser útil para fluidificar bronquitis y flemas, también elimina la tos y tiene propiedades astringentes y antiinflamatorias. También alivia los cólicos y dolencias estomacales y ayuda a expulsar los gases del tracto gastrointestinal. El laurel también tiene propiedades repelentes naturales y es efectivo contra insectos y plagas.

Por último, son muy importantes las propiedades relajantes de esta planta, que transmite bienestar y serenidad , de hecho se recomienda tomarla en forma de infusiones antes de acostarse, para conciliar el sueño.

¿Por qué usar una ramita de laurel en la ducha?

Como hemos visto, las propiedades del laurel son muchas. Explotarlas para obtener los máximos beneficios en la ducha es, por tanto, lo que podemos hacer para mejorar nuestro nivel de bienestar.

Para aprovechar las dos propiedades relajantes y desodorantes, el consejo es colocar una rama de laurel cerca del cabezal de la ducha y asegurarla con una cinta o cuerda para mantenerla en su lugar.

Procura que no se moje o perderá sus efectos. De hecho, es necesario asegurarse de que el vapor pase a través de las hojas y libere el agradable aroma de esta magnífica planta.

Alternativamente, puedes colocar unas ramitas de laurel en el baño, en un rincón donde se concentren los vapores. El aroma embriagador será liberado por las gotas invisibles de vapor que se esparcen por toda la habitación cada vez que te duchas o usas agua caliente .

Más consejos para que la ducha sea relajante

Existen otros remedios naturales para hacer que la ducha sea más relajante y conseguir un alto grado de bienestar psicofísico. Estos son algunos de los más efectivos:

–Aceites esenciales: remedio extremadamente eficaz, los aceites esenciales son perfectos para hacer que la ducha sea particularmente relajante. Mezcle 1 cucharadita de su fragancia favorita con agua tibia y colóquela en un tazón pequeño. ¡El calor del agua y el vapor de la ducha desprenderán un aroma maravilloso!

puñado de hojas de laurel
 

–Eucalipto y menta – Combinación perfecta para un baño fresco y perfumado, pero también muy relajante, el eucalipto y la menta son la elección ideal para conseguir una relajación profunda. Puedes hacer una especie de collar con las hojas de las dos plantas y pegarlo en un punto de la ducha donde no entre en contacto con el agua. ¡Frescura y perfume están garantizados!

– Ramita de lavanda : incluso una ramita de lavanda es ideal para desprender un maravilloso aroma en la ducha. Coloca la ramita lejos del agua y déjala hasta que ya no puedas oler la fragancia.

– Jabón de Marsella – jabón con un aroma embriagador, es ideal para una ducha relajante y perfumada. Coloca una pastilla de jabón de Marsella en la ducha y cuando abras el agua caliente, el vapor soltará su olor intenso y penetrante.

¡Con todos estos consejos podrás darte duchas relajantes y perfumadas como nunca antes lo habías hecho!